Eliminar tapón de cera del oído con productos naturales
Los oídos son una parte de la cara que casi siempre olvidamos limpiar y a la que, por lo tanto, deberíamos prestar más atención ya que pueden ser el origen de importantes patologías o simples tapones de cera que debemos eliminar.
La cera, y no la de las velas, se fabrica en el conducto auditivo externo, entre la parte carnosa de la oreja (la parte que se ve) y el oído medio. La piel de esta zona tiene unas glándulas y folículos especiales que producen cera, también llamada cerumen, que poco a poco llega hasta la apertura del oído, donde se cae o al lavarnos la eliminamos.
Esta cera tiene dos funciones bastante importantes, gracias a su composición combate las infecciones que entran por el oído y que podrían dañar la piel del interior del canal auditivo y por otro lado, es un escudo entre el mundo exterior y el tímpano ya que evita que el polvo, la suciedad y otros elementos entren al oído.
A pesar de sus beneficios, este aceite ceroso que se produce de forma continuada, si no se elimina produce los tapones en el oído. Eso se puede deber a varias razones como un conducto auditivo estrecho, una producción excesiva de cera o un exceso de bello. Todo ello puede llevar a que se cree el tapón y empiecen a aparecer sus síntomas:
- Sensación de taponamiento.
- Dolor de oído.
- Ruidos en el oído que provienen del interior.
- Pérdida de audición.
- Fiebre y secreción del oído.
En caso de que notéis alguno de estos síntomas Ear Drops Free de GSE es el producto perfecto para la eliminación mecánica del tapón de cera. Esto se debe a que en su composición hay una elevada presencia de glicerina y a su carácter higroscópico (absorbe humedad). Para notar su efecto basta con poner entre 1 y 2 gotas (3-4 veces al día) en el conducto auditivo y mantener la cabeza en esa posición durante algunos minutos.
Por lo demás, si no tenemos ningún síntoma, para eliminar esa cera poco hay que hacer, salvo una buena limpieza. Y, ¿cómo? En la ducha con la piel húmeda ya que el más fácil retirar el cerumen. Solo debemos dejar que el agua entre en los oídos durante un par de minutos con la cabeza ligeramente inclinada. Después la devolvemos a su posición normal para que la cera caiga y listo ya tenemos el oído limpio.
En cualquier caso, sí que queremos evitar que nos aparezcan tapones en los oídos podemos llevar a cabo algunas acciones que nos servirán mucho:
- No debemos usar bastoncillos de algodón para limpiarnos ya que pueden compactar el cerumen y empujarlo al tímpano originando la obstrucción.
- Al igual que los bastoncillos debemos evitar sacar la cera con cualquier otro objeto como algodón, alfileres, horquillas…
- No urges en el oído con los dedos.
- A poder ser no utilices tapones para dormir y evita los auriculares.
Cualquiera de estas acciones daña nuestro oído y puede incluso hacer sangrar al tímpano que de por si es muy delicado. Así que ya lo sabéis, una buena limpieza de la zona y evitar sacar la cera con cualquier objeto que no sea específico para quitar los tapones del oído.