La salud íntima requiere de cuidados especiales cambiantes en función del ciclo o de la época de la mujer, por eso recomendamos una serie de los mejores productos que se pueden adaptar mejora a cada caso.
A la hora de tratar las infecciones urinarias tenemos que diferenciar entre los que limpian las vías urinarias y los que tienen efecto antibacteriano
-ARÁNDANO ROJO ( CRANBERRY )
El arándano rojo es un fruto que limpia las vías urinarias no es en sí un antibacteriano pero ayuda a eliminar la bacteria despegándola de las vías urinarias
-GAYUBA
Acción diurética, porque lleva flavonoides que actúan sobre el tracto urinario facilitando las micciones. Presenta acción antiséptica al favorecer el volumen de líquido en las micciones. La gayuba contiene arbutina, una molécula a nivel intestinal, que produce una hidroquinona que tiene acción antiséptica sobre el tracto urinario. Además eliminada por la orina aporta una función desinfectante.
-ORÉGANO:
Antibacteriano
-EXTRACTO SEMILLA POMELO:
Es un bactericida, bacterioestatico de amplio expectro eficaz frente a centenares de bacterias patógenas, entre ella E. coli, y S faecalis, principales responsables de las cistitis. Tiene una selectividad exclusiva, capaz de atacar a bacterias patógenas sin afectar a la flora fisiológica. Es una propiedad única en su genero y y no habitual en los antibióticos tradicionales. Si a todo esto se le añade la absoluta inocuidad se entiende que GSE es un remedio absolutamente extraordinario que representa una ayuda natural incluso para problaematicas que generalmente presentan recidivas.
Las condiciones microbianas intestinales favorecen o limitan la aparición de la cistitis. Es importante que el intestino se encuentre en situación de eubiosis para garantizar su funcionalidad. En estas condiciones prevalece la flora microbiana beneficiosa capaz de contra restar la proliferación de microorganismos de las vías urinarias.
Cuando el intestino disminuye la flora bacteriana beneficiosa el terreno se mantiene libre para el ataque y colonización de patógenos.
PROTOCOLO DE ACTUACIÓN
Antes de empezar cualquier tratamiento es importante
1/ limpiar el intestino con CLEANER IN.
Como 2/ ANTIMICROBIANOS utilizamos:
Capsulas confort vías urinarias: Es el oleocaps numero 2
GSE Cystitis Rapid: GSE = Extracto de Semillas de Pomelo. Es bactericida y bacteriostático de amplio espectro, eficaz contra el E.coli. Además, contiene Gayuba, Brecina, Pilosella y Gatuña, útiles para mantener la función fisiológica del sistema urinario.
GSE CYSTITIS: Es más preventivo que el Rapid
Los productos de GSE tienen gayuba y no hay que tomarlos junto con Arándano Rojo
Como 3/ LIMPIADOR DE VIAS URINARIAS: Se suelen utilizar como preventivo o coadyuvante a otros tratamientos:
Cranberola cis-control Flash: los aceites esenciales, el arandano rojo y brezo tienen acción antimicrobiana. NO mata la bacteria, la “despega”. Los aceites esenciales que lleva, por el contrario sí son bactericidas.
Arandano Rojo de Santiveri en liquido
Siempre es importante repoblar las vías urinarias con 4/ PROBIOTICOS:
PROBIOTICOS GSE ACIDOPHILUS
PROBIOTICOS CYSTEEL HEEL (Contiene Arandano Rojo)
Hablaremos abiertamente con la paciente para asegurarnos de unos cuantos datos:
• Asegurarse de que no haya dolor pélvico en otros momentos diferentes a los días de su menstruación
• Consultar por la aparición inusual a nivel vaginal de sangrado o flujo.
• Preguntar por la aparición de menstruaciones dolorosas habiéndolas tenido hasta ese momento con pocas molestias.
• Recopilar los diferentes síntomas para identificar el problema y evaluar la posibilidad de derivar al médico o tratarlo desde la farmacia.
• Educación sanitaria a todas las pacientes (información de medicamentos, consejos, medidas higiénicas, dietéticas y/o conductuales).
• Instauración de terapia sintomática para los casos de dolores abdominales, incluso irradiados a la zona lumbar, muslos y dolor de cabeza.
AROMAFEMINA CÁPSULAS CONFORT (PRE)MENSTRUAL: Con AE de hinojo, lavanda, cardamomo, jengibre, lemongrass, eucalipto y menta piperita. Analgésico, antiinflamatorio, antiespasmódico, descontracturante y relajante nervioso.
ACEITE ESENCIAL DE ROMERO QT ALCANFOR :Antiespasmódico potente y analgésico, antiinflamatorio. Posología: Vía tópica (DE ELECCIÓN): 2-3 gotas, 4-5 veces al día, diluido bien en un aceite vegetal. Aplicarlo dando un masaje en la zona del bajo vientre. Apto a todas las edades, siempre que se diluya. Vía oral (COMPLEMENTARIA): 2 gotas, 3 veces al día, en una miga de pan, mientras duren las molestias, máximo 7-10 días seguidos.
ACEITE ESENCIAL DE YLANG-YLANG: Antiespasmódico, analgésico, antiinflamatorio y calmante del SNC. Posología: Vía tópica (DE ELECCIÓN): 2-3 gotas, 4-5 veces al día, diluido bien en un aceite vegetal. Aplicarlo dando un masaje en la zona del bajo vientre. Apto a todas las edades, siempre que se diluya. Vía oral (COMPLEMENTARIA): 2 gotas, 3 veces al día, en una miga de pan, mientras duren las molestias, máximo 7-10 días seguidos. Apto a partir de los 6 años. Vía olfativa (COMPLEMENTARIA): Inhalaciones profundas, conscientes y repetidas directamente del frasco o tras aplicación en la cara interna de las muñecas o en un pañuelo. Repetir a demanda.
Aromafemina cápsulas bienestar femenino Onagra: Cápsulas de 500 mg de aceite de onagra virgen y ecológico.
Curas depurativas:Al ser un problema hormonal. Cuanto más limpio tengamos el hígado más fácil eliminará el exceso de hormonas y por consiguiente tendremos menos efectos secundarios. No se recomienda hacer el tratamiento en pleno brote (por el efecto rebote)
MAGNESIO: Cada vez existen más evidencias sobre el papel que juega la deficiencia de magnesio en la dismenorrea, el SPM, las migrañas y en la prevención de los síntomas del climaterio. El mecanismo de acción aún está en discusión, pero se sabe que atenúa la hipersensibilidad al dolor mediante un bloqueo de los receptores N-metil-D-aspartato (NMDA), que son muy abundantes en el sistema nervioso y que están involucrados en el mantenimiento de la hiperalgesia y la disminución del umbral del dolor.
Se ha visto que el Mg contribuye también a disminuir los niveles de PGF2α, una de las principales involucradas en la dismenorrea, ya que este mineral es un cofactor de la Δ6-desaturasa.
Se puede encontrar en semillas, nueces, almendras, legumbres, verdura de hoja verde oscura (en general dietas ricas en granos no refinados y vegetales son altas en magnesio), trigo sarraceno, espirulina, cacao puro, etc.
Para tratar los hongos vaginales, vamos a comenzar a tratar el síntoma para aliviar a la paciente su malestar. Pero además vamos a tratar de dar solución al problema desde la base. Para ello,
.Actuando a nivel local: usaremos un óvulo o crema a nivel externo y posteriormente recolonizaremos con una buena ducha vaginal. Para ello, usaremos productos 100% naturales que protejan toda nuestra flora vaginal y que no provoquen ninguna disbiosis. También hay cápsulas de aceites esenciales que nos van a ayudar a subir las defensas, a quitar el dolor y a tratar la base.
.Actuando a nivel sistémico: unos probióticos antimicrobianos y unas tabletas recolonizadoras. Siempre de origen natural y biológico que nos ayuden a mantener la salud de la flora intestinal en equilibrio. Tenemos también unas enzimas específicas para digerir el hongo de manera natural.
Candisan es una fórmula sinérgica a base de ácido caprílico en sus diversas formas, extractos de plantas altamente concentrados (ajo desodorizado, semilla de pomelo, extracto de orégano, suma, echinácea, pau d'arco, nogal) y selenio
Y SIEMPRE vamos a recomendar realizar una buena limpieza intestinal, para acabar con el reservorio y conseguir unos buenos resultados.
Además vamos a seguir unas cuantas recomendaciones higiénico dietéticas que están en el estilo de vida.
En el caso de la menopausia es muy difícil instaurar un tratamiento ya que dependerá muchísimo de la sintomatología de cada mujer.
Como tratamiento principal vamos a recomendar a todas ellas una buena limpieza hepática e intestinal. Asi conseguiremos "partir de cero" con el resto de tratamientos que vayamos a recomendar y podremos paliar antes los síntomas.
Después nos tendremos que centrar en ir aliviando cada síntoma que podrá ser muy variado dependiendo de cada mujer.
Vamos por ello a elegir un tratamiento recomendado en cada caso.
Sofocos: cimicífugaInsomnio: triptófano
Osteoporosis: aporte natural de calcio, magnesio y vitamina D
Síndrome metabólico: aportes de omega 3, antioxidantes, ajo añejado...
Atrofia urogenital: jabón con pH específico y cremas lubricantes
Hay varios tratamientos para tratar las infecciones de orina, pero todos ellos son con necesidad de receta médica. Los protocolos de tratamientos han ido evolucionando en los últimos años..
Los tratamientos más utilizados son las antibióticos bactericidas de amplio espectro y las quinolonas
Antibióticos bactericidas de amplio espectro
Estos antibióticos son bactericidas, bloqueando la primera fase de la síntesis de la pared celular de la bacteria. Inhiben competitivamente la acción de la enzima fosfenol-piruvato-uridina difosfo-n-acetil-glucosamina-enolpiruviltransferasa. Esta enzima es necesaria para la síntesis del ácido uridina difosfato-n-acetil murámico constituyente esencial del peptidoglicano que forma la pared bacteriana.
Son antibiótico de amplio espectro, aunque actúan más intensamente sobre las bacterias gram (+) Son activos frente algunas especies anaerobias aunque no frente a bacteroides ni otros anaerobios gram (-)
Su mecanismo de especifico se reduce en una ausencia de resistencias cruzadas con otros antibióticos así como en una potencial acción sinérgica con ellos.
Son de primera elección en la cistitis por la baja resistencia de E. coli frente a estos antibióticos y por su eliminación renal, concentrándose en la orina.
QUINOLONAS
Las fluoroquinolonas son agentes muy efectivos por via oral frente a un buen número de infecciones sobre todo frente a gram (-). Conviene sin embargo evitar el uso indiscriminado para que la utilidad no sea anulada por difusión de cepas resistentes. Es el tratamiento de elección en infecciones de orina más complicadas. Tienen una alta actividad frente a pseudomonas aeruginosa, germen muy difícil de tratar por vía oral antes de la aparición de estos fármacos.
Son agentes bactericidas que actúan inhibiendo la ADN-girasa, una enzima que interviene en el plegamiento de la doble hélice de ADN y es fundamental para que la estructura tridimensional del material genético sea correcta. La acción es selectiva sobre ADN-girasa bacteriana.
Advertencias: Se ha asociado el uso de fluorquinolonas con un incremento del riesgo de tendinitis y rotura de tendones en todas las edades. El riesgo es mayor en ancianos tratados con corticoesteroides y los que han sido sometidos a transplantes (riñon, corazón, pulmón). Durante el tratamiento e inmediatamente después de este se debe evitar el exceso de ejercicio físico. Y ante la sospecha de una tendinitis se debe interrumpir el tratamiento y guardar reposo de la extremidad afectada.
Para la profilaxis antibiótica, se administran 50mg de nitrofurantoina, cada noche, durante 6-12 meses. Otra posibilidad sería la administración de 1 sobre de 3g de fosfomicina (Monurol) cada 10 días, también durante 6-12 meses. Sin embargo, aunque disminuyen considerablemente las infecciones recurrentes, aumentan el riesgo de padecer candidiasis bucal y vaginal, y la probabilidad de desarrollar resistencias.
El tratamiento que se suele usar de elección para el dolor generado por la regla son los AINES, que actúan como analgésico y antiinflamatorios. La administración profiláctica de paracetamol antes de la aparición del dolor no ofrece ventajas respecto a la administración cuando ya aparece. Existen en el mercado medicamentos que contienen, aparte de paracetamol, otros principios activos como la cafeína, antihistamínicos, etc., para intentar combatir otros síntomas que se presentan durante la menstruación (Saldeva Forte®, que lleva paracetamol, cafeína y dimenhidrinato).
El ácido araquidónico se metaboliza por dos sistemas enzimáticos diferentes: la cicloxigenasa, responsable de la formación de prostaglandinas, y la lipoxigenasa, que da lugar a los leucotrienos. Las prostaglandinas inducen las contracciones uterinas por la formación de calcio libre en las células del miometrio. Los AINE suprimen la actividad de la cicloxigenasa y, por tanto, la formación de prostaglandinas.
Cuando no existe respuesta a los AINE, es posible que los leucotrienos, que continúan sintetizándose, puedan seguir estimulando las contracciones de la musculatura uterina.
Los AINE se deben administrar desde el inicio del dolor y durante, al menos, 3 días. Su perfil de efectos secundarios incluye los síntomas gastrointestinales, como dispepsia, vómitos, ardor, dolor abdominal, diarrea y es treñimiento.
Otro de los tratamientos de elección suelen ser las terapias hormonales, evitenmente recetadas siempre por un facultativo. Ni que decir tiene que siempre y cuando se pueda evitar la ingesta de hormonas mucho mejor para nuestra salud.
Los más utilizados actualmente son los derivados azólicos, que poseen un mayor índice de curación.
Actualmente existen comprimidos orales, cremas internas y externas, y comprimidos vaginales. Se suele preferir la vía tópica para reducir los efectos secundarios y por su menor coste económico.
No obstante, no debe olvidarse el posible reservorio intestinal, que no se trata por vía tópica.
Estaremos tratando el síntoma pero nunca la base del problema.
El tratamiento de elección en la menopausia es la terapia hormonal sustituva. Se trata de medicamentos con receta médica obligatoria y con numerosos efectos secundarios como: sensibilidad en los senos, sangrados irregulares, cambios emocionales, náuseas, dolor de cabeza, aumento de peso, cáncer de mama, cancer de endometrio, cancer de ovario y canceres hormono dependientes en general, accidente cerebrovascular (ACV), tromboembolismo venoso...
Más allá de 3-5 años, los riesgos de estos efectos secundarios se ven aumentados.
También se usan Tibolonas, que son esteroides sintético con poca actividad estrogénica, androgénica y gestagénica, eficaz en síntomas vasomotores. Poseen los mismos efectos secundarios que la THS y además puede haber hirsutismo, piel grasa y descenso sobre todo al principio de las HDL.
Posteriormente, en función de la sintomatología que se padezca se recetarán unas medicaciones u otras.
Las condiciones microbianas intestinales favorecen o limitan la aparición de la cistitis.
Es importante que el intestino se encuentre en situación de eubiosis para garantizar su funcionalidad. Para ello es muy importante realizar una buena limpieza intestinal.
ALIMENTOS QUE SE DEBEN ELIMINAR:
Azucares simples (azúcar blanco, miel, …),
Leche y productos lácteos, Carne (roja y blanca),
Bebidas y alimentos precocinados, en conserva, refinados,
Alimentos a los que se es intolerante o alérgico,
Café, té, alcohol...
ALIMENTOS QUE DEBEN SER CONSUMIDOS CON POCA FRECUENCIA:
Cereales refinados,
Patata,
Maíz,
Fruta muy dulce,
Azúcar de caña integral
ALIMENTOS RECOMENDABLES (tomar suplementos)
.Alimentos ricos en fibra (verduras, legumbres, preferiblemente de temporada)
.Cereales y pasta integral
.Pescado
.Semillas oleaginosa
-Se recomienda tomar al menos 2 litros de agua al día entre comidas a temperatura ambiente, eligiendo aguas con residuo seco menor (<50mg) y un PH entre 6 y 7). Suplementar con zumos.
-Adecuada limpieza genitourinaria, siempre desde la parte delantera hacia la trasera.
-Lubricación adecuada durante las relaciones sexuales.
-Evitar el uso de anticonceptivos que puedan favorecer la proliferación de bacterias como diafragmas y aros vaginales.
-No utilizar ropa interior muy ajustada o de tejido sintético que que impidan la transpiración.
-Evitar el estreñimiento, ya que estas personas no terminan de evacuar totalmente y la exposición de E.coli es mayor.
-Utilizar compresas y ropa interior de algodón. Es recomendable no utilizar el Salva-Slip.
-Cuidado con la ropa mojada. El frio realiza una vasoconstricción periférica, no llegan bien los linfocitos, macrófagos …sistema inmunitario y prolifera el patógeno. Porque en tratamientos cortos siempre quedan cepas.
-Practicar ejercicio de forma continuada, ya que ayuda a producir endorfinas que alivian el dolor.
-Intentar controlar el estrés y los nervios. Practicar técnicas de relajación. Suplementar con complementos siempre que sea necesario
-Dormir lo suficiente, en especial antes de y durante la menstruación.
-Seguir una dieta con pocas grasas y que sean de buena calidad, procurando mantener un peso saludable. El aporte correcto de vitaminas sobre todo del grupo B, de calcio y de magnesio es importante en la gestión del dolor.
-Vitamina B6: ingesta diaria de vitamina B6 podría aumentar los niveles de progesterona y atenuar los periodos dolorosos y las molestias producidas por el síndrome premenstrual, sobre todo si se combina con el magnesio.
-Magnesio: El magnesio puede ser útil tanto para evitar o aliviar el dolor menstrual como para prevenir el síndrome premenstrual, sobre todo en lo que se refiere a la retención de líquidos, que agudiza las molestias, así como a los dolores de cabeza que a veces van asociados a la menstruación. Además, este mineral ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y el nerviosismo, que contribuyen a empeorar los síntomas.
-Vitamina E: Esta vitamina bloquea el aumento de los niveles de prostaglandina, una sustancia espasmódica que aumenta la intensidad de la contracción del útero y, por lo tanto, pueden producir o incrementar el dolor menstrual.
-Vitamina B1: La ingesta de vitamina B1, también conocida como tiamina, ayuda a prevenir y tratar la carencia de magnesio. Además, su ingesta puede ayudar a reducir el dolor menstrual en mujeres adolescentes y jóvenes.
-Aceite de onagra o borraja: Estos dos aceites, sobre todo el de onagra, han sido recomendados durante años por los ginecólogos para regular el ciclo menstrual y reducir las molestias asociados a él, tanto durante la ovulación, como el síndrome premenstrual y la dismenorrea. Son eficaces porque contienen Omega-6 y ácido gammalinolénico (GLA), con propiedades antiinflamatorias.
-Omega 3: Al igual que ocurre con el omega-6, este aceite esencial tiene un efecto antiinflamatorio que mejoraría los síntomas asociados a la menstruación, como el dolor abdominal y de mamas, además del estado anímico.
-Extracto de azafrán: tomado con regularidad reduce los dolores menstruales y además nos ayuda a regular el estrés y a mantener un buen estado anímico.
-Acostarse de espaldas con las piernas elevadas o de costado con las piernas dobladas.
-En los momentos de máximo dolor se recomienda reposo, aplicación de calor, ejercicios de relajación y duchas con agua caliente. Recomendamos usar bolsas de semilla de aplicación de calor directa sobre la zona del dolor.
Como hemos explicado en el alivio natural es muy importante acabar con el reservorio intestinal por lo que es muy importante:
.Hacer una buena limpieza intestinal
.Reequilibrar la flora vaginal, pero también la flora intestinal
.Uso de probióticos vaginales/orales
Y además unos cuantos consejos higiénico-sanitarios:
.Utilizar ropa holgada de algodón, evitar los salvaslip
.Reducir el consumo de hidratos de carbono
.Completar el tratamiento, aunque hayan desaparecido los síntomas
.Las compresas, los tampones o las duchas vaginales pueden alterar el ecosistema vaginal. Utilizarlos 100% algodón.
.Utilizar productos especialmente formulados para la zona vaginal, con pH adecuado
.No utilizar espermicidas durante el tratamiento
Dentro del estilo de vida nos vamos a centrar en dar consejos en base a cada síntoma más importante que ocasiona la menopausia.
•Dejar de fumar o, al menos, disminuir el número de cigarrillos. Hay una relación directa entre el tabaco y los sofocos, y, más concretamente, entre el número de cigarrillos y la intensidad de los sofocos.
•Ejercicio físico. Disminuye la probabilidad de sufrir sofocos y genera endorfinas que disminuyen la irritabilidad y depresión, ayudando a mantener además el peso adecuado. Realizar al menos 30 minutos diarios.
•Los ejercicios de yoga y respiración disminuyen la intensidad y duración de los sofocos.
•Evitar el sobrepeso y la obesidad, ya que predisponen a los sofocos.
•Seguir una alimentación variada y equilibrada.
•Moderar el consumo de alcohol.
•Evitar bebidas calientes tipo café o té.
•Vestirse con varias capas de ropa.
• Regularizar el ciclo sueño-vigilia. Para ello, mantener un horario regular de sueño, 6-8 horas diarias, evitando siestas. Evitar permanecer en la cama más de 8 horas.
• Hacer cenas ligeras para que la digestión sea lo más fácil posible y no interfiera en el sueño. Añadir hidratos de carbono no refinados, que favorecerán la sedación y la entrada en el cerebro de nutrientes como el triptófano (aminoácido precursor de la serotonina), que son necesarios para dormir. Fuentes de triptófano son el plátano, el atún, el pollo, quesos, huevo y frutos secos.
• No realizar una gran ingesta de líquidos antes de ir a dormir. Evitar también ir a dormir con sensación de hambre.
• Evitar estimulantes antes del sueño. Preferir las infusiones relajantes, a las que se puede añadir la miel sueño.
• Reducir, en la medida de lo posible, los factores estresantes.
• Mantener la habitación en condiciones óptimas para dormir, con un ambiente tranquilo y relajado sin exceso de luz, con una temperatura adecuada.
• Utilizar la cama para dormir, no para trabajar, comer o ver la televisión.
• Evitar ir a la cama sin sueño; lo mejor es ir a la cama somnoliento. Si no, es posible realizar técnicas relajantes. Si después de media hora en la cama se sigue despierto, es mejor levantarse y realizar alguna actividad relajante y no volver a la cama hasta tener sensación de sueño. Repetir esta operación tantas veces como sea necesario.
• Utilizar jabones con el pH fisiológico de esta etapa (más alcalino).
• Evitar desodorantes en la zona y fibras sintéticas.
• Ejercicio físico. Peso adecuado.
• Evitar el tabaco.
• Mantener la actividad sexual y realizar ejercicios de Kegel para controlar la musculatura vaginal.
• Autoexploración frecuente y visitas ginecológicas al día.
• Alimentación adecuada: dieta mediterránea con la aportación de los minerales necesarios para la formación ósea (Ca, P, Mg y K) y las vitaminas A, D y K.
• Actividad física moderada y mantenida en el tiempo.
• Eliminar tabaco y alcohol.
• Disminuir el consumo de cafeína
• Dejar de fumar o, al menos, reducir el número de cigarrillos. Hay una relación directa entre el tabaco y las enfermedades cardiovasculares.
• Practicar ejercicio físico durante media hora o tres cuartos de hora diariamente es muy beneficioso para el control de la diabetes, colesterol e hipertensión. Al menos tres días a la semana para que los beneficios sean visibles.
• Los ejercicios de yoga y respiración ayudan en el control de la tensión y de los problemas de insomnio, importante en el síndrome metabólico.
• Control del sobrepeso y la obesidad.
• Seguir una alimentación variada y equilibrada, con abundantes verduras, legumbres y pescado.
• Moderar el consumo de alcohol.
• Mantener un horario regular de sueño, 6-8 horas diarias, evitar siestas.
• No realizar cenas pesadas antes de ir a dormir.
La cistitis en una infección de orina debida a una contaminación de la vejiga y las vías urinarias.
La infección del tracto urinario es una de las patologías que más se consultan en la farmacia.
La cistitis es mucho más frecuente en mujeres que en hombres, por razones anatómicas. Sobre todo después de los partos, ya que el músculo disminuye y la vejiga tiende a “bajarse”, por lo que el ano está más cerca del tracto urinario. De este modo, es más fácil la contaminación por E. coli. Esta infección afecta al 50% de las mujeres, y se calcula que al menos una vez en la vida tendrán un episodio.
La vejiga es un órgano fisiológicamente estéril, por lo que cualquier microorganismo que la contamine generará problemas urinarios.
Por otro lado, el 20% de las mujeres que padecen esta infección suelen tener recurrencias. Se consideran infecciones recurrentes si en el último año ha tenido al menos 3 episodios o 2 episodios los últimos 6 meses. Las recurrencias pueden ser tanto por reinfección como por recidiva.
En las infecciones del tracto urinario, el 90% de los casos son producidas por Escherichia coli. Entre las etapas de la infección, la adherencia de la bacteria al epitelio urinario es fundamental. Para ello, E. coli dispone de varios factores de virulencia, tales como fimbrias, proteínas auto-transportadoras, toxinas y sideroforos.
La dismenorrea es el dolor uterino en el momento de la menstruación. Puede aparecer con las menstruaciones o precederlas 1 a 3 días. El dolor tiende a ser más intenso 24h después del inicio de la menstruación y continúa por 2 a 3 días.
La dismenorrea es un dolor de tipo cólico en forma espasmódica durante el flujo menstrual (dismenorrea espasmódica) o bien un dolor más sordo pero continuo que suele darse antes de las reglas y que remite cuando el flujo se instala (dismenorrea congestiva); el dolor afecta a la parte baja del abdomen, la región lumbosacra, la espalda y puede irradiar hasta las piernas. Otros síntomas que pueden acompañar son las náuseas, los vómitos y la diarrea. Con mucha menor frecuencia puede aparecer un síncope durante los estados de dolor agudo.
El principal factor de influencia en las dismenorreas es la hipersecreción de prostaglandinas (PG) por parte del endometrio (capa más interna del útero donde se implanta el óvulo). Otros factores como pueden ser la vasopresina y los leucotrienos están menos implicados, aunque sus concentraciones también son más elevadas en los casos de dismenorrea.
El endometrio sintetiza prostaglandinas (PGE2 y PG F2α) sobre todo en la fase lútea y de manera creciente, gracias a la secreción de progesterona por parte del cuerpo lúteo. En las mujeres dismenorreicas, la concentración de PG está más elevada en el endometrio, sobre todo la PGF2α, que es uterotónica y va soconstrictiva, frente a la PGE2, que es uterorrelajante y vasodilatadora. Si el equilibrio de secreción estrógenos-progestágenos está desregulado, se incrementa la dismenorrea. El dolor en la dismenorrea es debido a la hipoxia tisular que se produce tras la hipercontractibilidad del miometrio (capa muscular del útero) y a la vasoconstricción de las arteriolas de la musculatura uterina.
Las dismenorreas se pueden producir ya días antes de la regla, prolongarse los dos o tres primeros días o persistir durante toda la menstruación e incluso más allá. Los dolores van desde una simple molestia a la incapacitación laboral/escolar. La automedicación es habitual con mayor o menor grado de solución.
DISMENORREA PRIMARIA
Se presenta durante la menstruación sin que haya una enfermedad pélvica de base y aparece generalmente tras la menarquia y primeros años menstruales. Se ha asociado a los ciclos que ocurren con ovulación; las mujeres que tienen menstruaciones sin ovulación no han tenido la estimulación de la progesterona y generalmente no presentan dismenorrea, de ahí que uno de los tratamientos de la dismenorrea sean los anticonceptivos hormonales.
Puede llegar a afectar hasta al 50% de las mujeres a partir de la adolescencia. En un 5-15% de los casos, la dismenorrea es severa, interfiere con la actividad diaria de la mujer y afecta su calidad de vida. La edad y los embarazos disminuyen la severidad de la dismenorrea primaria.
DISMENORREA SECUNDARIA
En este caso existe una patología pélvica de base (infecciones pélvicas, endometriosis, adherencias, pólipos, uso del DIU…), suele aparecer en mujeres de más de 30 años y se agrava con el tiempo.
Entre las causas específicas destacan:
• Endometriosis
• Enfermedad inflamatoria pélvica
• Estenosis cervical
• Adenomiosis
• Congestión venosa pélvica
• Pólipos uterinos o adhesiones
• Complicaciones asociadas a los dispositivos intrauterinos
• Idiopática
El inicio del dolor en la dismenorrea secundaria puede no coincidir con la menstruación y prolongarse durante más tiempo. Suele afectar a mujeres por encima de los 30 años de edad y el dolor va incrementando de intensidad a lo largo del tiempo. El patrón de dolor difiere del que se produce en la dismenorrea primaria y no suele remitir con el uso de anticonceptivos hormonales orales o con los AINE.
Si la mujer no responde a esta terapia farmacológica probablemente se tratará de una dismenorrea secundaria y habrá que buscar otra causa.
Una infección por hongos vaginales es una infección micótica que provoca irritación, flujo e intensa picazón en la vagina y la vulva, los tejidos que se encuentran en la apertura vaginal.
El agente infeccioso es un hongo del género Candida. Representan el 20-30% de las vaginitis infecciosas, de las cuales un 5 % presentarán episodios recurrentes que a menudo son difíciles de tratar. No se considera ITS (Infección de Transmisión Sexual), aunque la incidencia aumenta con el inicio de la actividad sexual en la segunda década de la vida, siendo el principal pico de incidencia los 20-40 años.
Los hongos del género Candida son microorganismos eucariotas unicelulares que se reproducen en ambiente aeróbico o microaeróbico por gemación, originando hifas idénticas a las células madre; su temperatura de desarrollo ideal son 37°C a diferentes pH, y se adhieren a las células epiteliales de la vagina.
Además, produce una micotoxina y tiene capacidad inmunosupresora dirigida a macrófagos y neutrófilos que altera su quimiotaxis. Se ha visto también que esta especie tiene capacidad de unión a la transferrina y fibronectina, quedando protegida así de la fagocitosis y favoreciéndose su desarrollo.
Candida tiene diferentes fenotipos según necesidad y capacidad invasiva; la forma responsable de la transmisión es el fenotipo productor de esporas, que coloniza así la vagina de manera asintomática. Cuando estas esporas germinan produciendo hifas o micelios, aparecen los síntomas.
FISIOLOGÍA DE LA VAGINA
En la vagina existe un equilibrio entre sus pobladores microscópicos; si este equilibrio se perturba, se produce una disbiosis en la que, o bien la población bacteriana residente disminuye, o bien las otras especies proliferan en exceso.
Los pobladores autóctonos de la vagina son los lactobacilos (Lactobacillus crispatus, L. iners, L. jensenii y L. gasseri), aunque también se pueden encontrar otras especies, que incluyen Gardnerella vaginalis, Mycoplasma hominis y Escherichia coli, además de una gran diversidad de géneros, como Atopobium, Prevotella, Mobiluncus, Megasphaera, Dialister, Sneathia, Streptococcus, Pseudomonas, Leptotrichia, Aerococcus, Ureaplasma y Mobiluncus. Aún no se sabe si la presencia de estos microorganismos es propia de mujeres sanas o si se trata de mujeres con una vaginosis bacteriana asintomáticas.
La vagina, además de la flora autóctona, dispone de diversos mecanismos de defensa natural:
• Anatomía específica.
• Moco cervical, que actúa como un biofilm.
• Descamación vaginal.
• Acidificación biológica del pH (4,5).
• Secreción de hormonas.
• Presencia de glucosa.
• Sistema inmunitario que defiende contra infecciones.
• Actividad biológica del lactobacilo.
La menopausia se diagnostica de forma clínica después de un año de amenorrea. Las determinaciones hormonales de confirmación son: FSH > 40 mU/ml y estradiol <20 pg/ml confirmadas en dos o tres determinaciones.
Como se ha visto anteriormente, el ciclo hormonal femenino es complejo y está modulado, principalmente, por los pulsos hormonales y la producción de estrógenos, orquestado todo ello por el eje hipotálamo-hipófisis-ovario.
Antes de que se empiecen a observar los síntomas clínicos de la menopausia, el ovario empieza a sufrir cambios, como la alteración de la fecundidad, producción anormal de esteroides...Esto comienza aproximadamente a los 35 años.
La perimenopausia es el inicio de la disfunción endocrina del ovario propiamente dicha y ocurre entre los 40 y 54 años, durando de 4 a 10 años de media. Las concentraciones de estradiol y FSH se mantienen prácticamente normales y van cambiando de forma progresiva hasta que alcanzan valores de menopausia. Sus niveles dependen del momento del ciclo hormonal.
Las vías urinarias humanas están constituidas por un conjunto de órganos huecos que forman un conducto que se inicia dentro del riñón y continua a través de unos canales estrechos llamados uréteres, llega a la vejiga y desde aquí termina con la uretra hacia el exterior.
Tanto el tramo de la vía urinaria desde el riñón a la vejiga es estéril y está libre de microorganismos y bacterias de cualquier tipo (excepto donde finaliza la uretra) que hay una pequeña cantidad de microorganismos que permanecen allí por un espacio corto de tiempo, debido a que son arrastrados fuera del organismo por la orina. Cuando estas bacterias no son expulsadas por la orina, permanecen en la uretra durante más tiempo, lo que les permite posteriormente colonizarla, dando lugar a una infección. La infección se manifiesta en forma de inflamación de los tejidos de las vías urinarias inferiores dando lugar a la cistitis.
Cuando las defensas naturales del organismo fallan, o hay una sobrecarga de patógenos, estos pueden venir de varios lugares, del tracto urinario del organismo usando diversos canales: la via hemática, el sistema linfático, la via enterourinaria. Cuando se produce una subida de las bacterias desde el canal de la uretra, especialmente en las mujeres por proximidad anatómica, es fácil que las bacterias fecales migren hasta el aparato urinario entrando en la uretra y colonizándola.
En cuanto a los factores de riesgo, se pueden dividir en dos grupos:
- Mujeres premenopáusicas: frecuencia de las relaciones sexuales (es importante orinar después), uso de espermicidas, nueva pareja sexual (ya que se intercambian nueva microbiota), haber tenido la infección antes de los 15 años, antecedentes familiares, etc.
- Mujeres postmenopáusicas: bajos niveles de estrógeno y factores que afectan al correcto vaciado de la orina, como incontinencia urinaria, presencia de cistocele y residuo postmiccional. La disminución de los niveles vaginales de estrógeno provoca una disminución del glucógeno vaginal. En consecuencia, disminuyen también las colonias de Lactobacillus spp., aumentando así el pH vaginal, favoreciendo la colonización de enterobacterias.
• Tener familiares directos con dismenorrea.
• Tener estrés crónico.
• Llevar una vida sedentaria, falta de ejercicio.
• Ingesta de cafeína (café, refrescos de cola…)
• Enfermedad inflamatoria pélvica.
Las causas principales son las que alteran el equilibrio vaginal, que puede ser debido a:
• Factores exógenos: actividad sexual, uso de antibióticos, uso de jabones, uso de desodorantes, fibras sintéticas, duchas vaginales, DIU e intervenciones ginecológicas.
• Factores endógenos: menstruación, variación de niveles hormonales según edad y momento, inmunidad local y sistémica y enfermedades sistémicas.
• Sobreinfección por patógenos que puedan alterarlo.
• En la menopausia, con la disminución de estrógenos, la vagina se atrofia, baja el glucógeno y se desarrolla menos la flora vaginal, volviéndose el pH de nuevo alcalino (5.0 – 7.5).
• Ante un exceso de estrógenos aparece un exceso de glucógeno y también de descamación, elevan do el carbono ambiental, que acidificará el medio en exceso, y permitiendo la infección por alteración del equilibrio. Esta situación ocurre durante el embarazo, periodo en el cual se produce un aumento de la vascularización vaginal y de las secreciones vaginales. El pH excesivamente ácido y el glucógeno en exceso crean un medio de cultivo ideal para el desarrollo de hongos.
.Y otra de las causas que puede ser lo más importante es el tema del reservorio. La Candida es muy oportunista y crea unos grandes reservorios, a nivel intestinal. Por lo que es muy importante acabar con ella a nivel intestinal.
Las causa de la menopausia es la edad.
La menopausia conlleva un montón de síntomas que pueden depender de unas causas u otras.
- Disuria: dificultad o dolor en la evacuación de la orina
- Polaquiuria: aumento del número de micciones
- Orina turbia, a veces con rastros de sangre (Hematuria)
- Dolor lumbar
- Falta de secreción vaginal
- Ardor
- Necesidad constante de orinar
.Dolor en la parte inferior del abdomen
.Calambres en la parte inferior del abdomen
.Dolor en la parte baja de la espalda.
.Dolor que se extiende a lo largo de las piernas
.Náuseas
.Vómitos
.Diarrea
.Fatiga
.Dolor, irritación, ardor...
.Secreción vaginal (leucorrea)
.Sequedad vaginal en algunos casos
.Disuria vulvar durante la micción
.Eritema y edema
La sintomatología de la menopausia incluye:
•Disminución de la líbido
•Atrofia urogenital
•Sequedad de piel y mucosas (incluida vaginal y ocular)
•Problemas urinarios
•Dispareunia
•Redistribución androide de la grasa corporal
•Pérdida de masa ósea/osteoporosis (sobre todo, durante los 5 primeros años)
•Síndrome metabólico-riesgo cardiovascular.
Los denominados síntomas neurovegetativos incluyen sofocos y sudoraciones, insomnio, palpitaciones, ansiedad e incluso depresión, cefaleas, dolores musculares y articulares... Se les llama así porque están modulados por el sistema nervioso autónomo (SNA) y tienen lugar ya desde la perimenopausia debido según parece a los cambios hormonales. De todos ellos, en la farmacia la consulta más frecuente con diferencia son los sofocos y el insomnio.