La faringitis es la inflamación de la mucosa que recubre la faringe, área justo detrás de la boca y que cursa con dolor de garganta. Aquí encontrarás la mejor selección de productos naturales para poder comprar para tratar la faringitis y el dolor de garganta en sobres, comprimidos, sprays, gotas... Apostando siempre por productos naturales que nos ayuden a la curación y con calidad farmacia.
Desde siempre en el mundo natural y en la actualidad se han utilizado los productos de la colmena para ayudarnos en todas las afecciones bucofaríngeas, con grandes resultados. Nos transmiten los beneficios de las plantas que polinizan a través de todos sus productos. Pero no todos los productos de la colmena son de la misma calidad. Ya que la industria alimentaria para mejorar su rendimiento somete a estrés a las abejas alimentándose de una manera artificial, perdiendo parte de las propiedades y eficacia de sus productos. Por eso, es muy importante ver la calidad de los productos que compramos.
Dentro de los productos de la colmena, encontramos sprays para calmar el dolor, como el spray nomada de urgencia de Ballot Flurin que evita y calma los dolores de garganta con una acción inmediata. Aplicar desde los primeros síntomas una sola pulverización en la boca, repetir hasta 2-3 veces al día como máximo durante 7 días.
Y además también tenemos una amplia selección de pastillas para aliviar el dolor y la inflamación, ayudándonos a paliar el síntoma como Aromaforce pastillas calmantes de pranarom: pastillas a base de aceites esenciales 100% puros y ecológicos. Tratan el dolor y la afonía. Se toman de 2 a 5 pastillas al día durante un máximo de 5 días. Y Oral tabs Gse: comprimidos para el tratamiento de los estados inflamatorios de la mucosa orofaríngea en caso de faringitis, amigdalitis, dolor de garganta… Se pueden tomar de 3 a 4 comprimidos al día, disueltos en la boca.
Muy importantes son también todos los complementos para ayudarnos a recuperar la voz, ya que el ser humano se comunica a través del lenguaje y de la voz, y una pérdida de voz puede tener mucho significado emocional. Para ello, tenemos multitud de sprays y extractos a base de miel de alta calidad. Spray sonrisa Ballot flurin: spray sin alcohol que ayuda a recuperar la voz y mantener una boca sana. Propolgola Spray erísimo trepat Diet: spray a base de erísimo, conocida como la planta de los cantantes que ayuda a recuperar la voz.
Si la infección es bacteriana, tenemos también una amplia selección de antibióticos naturales para ayudar a tratarla. No hay que olvidarse que aunque se trate de un antibiótico natural deberemos acompañarlos siempre de unos probióticos de calidad, para evitar todos los efectos secundarios y ayudarnos a repoblar y cuidar nuestra flora. Entre los antibióticos naturales de vías altas tenemos biotic forte a base de semillas de pomelo y oleocaps 1 vías respiratorias.
Además tenemos multitud de productos naturales para ayudar a nuestro sistema inmunológico y subir así nuestras defensas para ayudarnos a luchar contra los patógenos y evitar las anginas de repetición.
Normalmente todos estos productos naturales en forma de sprays, pastillas, comprimidos o gotas... podemos usarlos varias veces al día, pero recomendamos de todas formas siempre mirar la información o prospecto del producto.
Porque la faringitis cursa con inflamación en la zona y normalmente nosotros siempre respetamos la inflamación porque es la respuesta inmunológica que da el cuerpo a la infección para combatirla. Como respuesta inmunológica a la infección se produce una inflamación que en algunos casos se puede extender hasta la tráquea, dificultando el respirar. Esta inflamación origina dolor y aunque aliviamos el dolor, eso no significa que estemos curando la enfermedad. Además en estas circunstancias es más fácil que nos infecten microorganismos patógenos: virus, bacterias, hongos, parásitos etc...
La inflamación es una buena respuesta inmunológica para poner en marcha todo nuestro sistema de defensa que nos lleva a la curación. Si bajamos la inflamación aliviamos una molestia pero vamos en contra de nuestro sistema inmunológico. Entendemos el uso de antinflamatorios en esta patología cuando la inflamación de las amígdalas supone un riesgo importante para la salud, que hasta puede dificultar el tragar alimentos y respirar correctamente, pero no su uso habitual.
La toma de antiinflamatorios va hacer que el proceso no sea tan agudo, no haya tanto dolor y tanta inflamación, pero que se alargue en el tiempo. Es decir, unas anginas que pueden durar dos o tres días, tomando AINES no van a ser tan molestas pero van a durar más días y van a ir debilitando paulatinamente nuestro sistema inmunológico, facilitando las anginas de repetición.
El consumo de antiinflamatorios puede provocar lesiones en las mucosas, no sólo en la mucosa gástrica, sino en todas las mucosas. Por eso mucha gente consume en estos casos, omeprazol, creyéndose que se trata de un protector gástrico, pero no es así. El omeprazol es un antisecretor que modifica el pH gástrico inhibiendo la absorción de muchos nutrientes y vitaminas (vitamina B12), y disminuye los niveles de magnesio en sangre, alcalinizante natural, necesario para huesos, dientes, articulaciones… y cuyo déficit puede originar calambres, contracturas (subida de bola), parpadeo involuntario (tic del ojo), rigidez articular, acentuación de los dolores espasmódicos: regla, cólicos
La faringitis es la inflamación de la mucosa que recubre la faringe, área justo detrás de la boca y que cursa con dolor de garganta.
La faringe es un músculo, revestido de mucosa, en forma de tubo que ayuda a respirar
• La faringitis afecta el área justo detrás de la boca o la faringe.
• La amigdalitis es la hinchazón y el enrojecimiento de las amígdalas, el tejido blando en la parte lateral de la boca.
• La laringitis es la hinchazón y el enrojecimiento de la caja de la voz o laringe (parte más inferior de la garganta)
• Estrés emocional, estrés laboral, estrés familiar.
• Agotamiento nervioso, ansiedad y agotamiento físico, fatiga, falta de sueño.
• Déficit nutricionales por malos hábitos alimentarios. Comidas fast food, basura, procesadas…
• Aires acondicionados, andar en zonas con muchos contrastes de temperaturas (aeropuertos, autobuses, estaciones, tiendas…), bebidas frías y con hielos.
• Calefacciones de aire, falta de ventilación y ambientes secos.
• Enfriamiento después de sudar.
• Por mojarse: los pies, el pelo...
• Infecciones víricas. La mayoría de las infecciones están causadas por virus que sólo si nuestro sistema inmunológico no puede superar se sobre infectará con bacterias.
• Infecciones bacterianas
• Otras infecciones: hongos, parásitos…
• Enfermedades del sistema inmune y/o linfático.
• Dolor en la zona de la garganta.
• A la vista, se observa la faringe roja e inflamada. Puede ir acompañada de la inflamación de algún ganglio cervical.
• Pueden observarse unas placas de exudado blanquecino o grisáceo en la faringe, que sólo si están infectadas excretan pus. Con un aliento fétido en ocasiones.
• Además puede extenderse la inflamación y el enrojecimiento a otras zonas de la mucosa de la garganta.
• Voz ronca y afónica.
• No siempre van acompañadas de fiebre. En infecciones bacterianas cursan con fiebres más altas y normalmente en infecciones víricas con fiebres más bajas.
• Cuando la infección es más importante el dolor puede irradiar hasta el oído.
1/ Paliar el síntoma: aliviar el dolor y la inflamación será nuestro primer paso para combatir la faringitis. Respetamos la inflamación como respuesta inmune, pero intentaremos modularla y paliar los síntomas.
2/ Recuperar la voz. El ser humano se comunica a través del lenguaje y de la voz, y una pérdida de voz puede tener mucho significado emocional. Tendremos que buscar las causa y el origen y tratarlas para de verdad llegar a la auténtica curación.
3/ Tratar la infección + probióticos. En caso de infección bacteriana lo trataremos con un antibiótico natural específico para las vías altas. Al tratarse de un antibiótico, recomendamos siempre tratarlo junto con un antibiótico.
4/ Subir el sistema inmunológico. Hay que reforzar el sistema inmunológico para ayudarnos a luchar contra el patógeno y evitar además las anginas de repetición.
5/ Buscar el origen. Normalmente cada persona tiene tendencia a enfermar de una manera concreta y suele repetirse cada vez que bajan las defensas. Hay personas que tienen tendencia a hacer faringitis, otras anginas, otras otitis, bronquitis... En todos los casos siempre hay que reforzar nuestro sistema inmunológico. Especialmente afectados son: oradores, cantantes, profesores, teleoperadores, y todas las personas que trabajamos de cara al público...
Primero lo que buscaremos es aliviar el dolor con: moléculas anestésicas, analgésicos y antiinflamatorias.
• Anestésicos: duermen la zona para evitar el dolor de una manera inmediata. Ese órgano queda dormido, debilitado para su defensa, reduciendo la secreción de saliva.
• Analgésicos: alivian el dolor sin dormir la zona, creando una falsa percepción de mejoría, suprimiendo una alerta muy importante que nos da el cuerpo que es el dolor, para avisarnos que está enfermo y que necesitamos cuidarnos. Paracetamol…
• Antipiréticos: Son medicamentos que tratan la fiebre de manera sintomática, la fiebre en la mayor parte de las ocasiones es la respuesta inmunológica de nuestro cuerpo para combatir un patógeno, por lo que aquí estaríamos yendo en contra de nuestro cuerpo y tardaríamos un poco más en recuperarnos. Sólo se recomendaría su toma si la fiebre es muy alta y tras la consulta con el médico. Si se toma sería aconsejable realizar una limpieza hepática ya que estos se absorben en el hígado y generan toxicidad. Paracetamol… dolostop, gelocatil…
• Antiinflamatorios: como la faringe están muy inflamada, se utilizan antiinflamatorios para bajar la inflamación y reducir así el dolor. Ibuprofeno, naproxeno, flurbiprofeno… lizifen, strefen…
La inflamación es una buena respuesta inmunológica para poner en marcha todo nuestro sistema de defensa que nos lleva a la curación. Si bajamos la inflamación aliviamos una molestia pero vamos en contra de nuestro sistema inmunológico. Entendemos el uso de antinflamatorios en esta patología cuando la inflamación de las amígdalas supone un riesgo importante para la salud, que hasta puede dificultar el tragar alimentos y respirar correctamente, pero no su uso habitual.
La toma de antiinflamatorios va hacer que el proceso no sea tan agudo, no haya tanto dolor y tanta inflamación, pero que se alargue en el tiempo. Es decir, unas anginas que pueden durar dos o tres días, tomando AINES no van a ser tan molestas pero van a durar más días y van a ir debilitando paulatinamente nuestro sistema inmunológico, facilitando las anginas de repetición.
El consumo de antiinflamatorios puede provocar lesiones en las mucosas, no sólo en la mucosa gástrica, sino en todas las mucosas. Por eso mucha gente consume en estos casos, omeprazol, creyéndose que se trata de un protector gástrico, pero no es así. El omeprazol es un antisecretor que modifica el pH gástrico inhibiendo la absorción de muchos nutrientes y vitaminas (vitamina B12), y disminuye los niveles de magnesio en sangre, alcalinizante natural, necesario para huesos, dientes, articulaciones… y cuyo déficit puede originar calambres, contracturas (subida de bola), parpadeo involuntario (tic del ojo), rigidez articular, acentuación de los dolores espasmódicos: regla, cólicos
• Antisépticos: son antimicrobianos de uso local, para chupar, hacer gárgaras… para evitar que avance la infección. Clorhexidina, cloruro de benzalconio… phonal, fodonal, faringesic, bucometasana…
No tienen una acción selectiva sólo para el patógeno, sino que también destruyen parte de nuestra flora bucofaríngea que es la que nos defiende de la entrada de microorganimos por la boca cuando comemos y respiramos.
• Antibióticos: sólo son útiles en anginas de origen bacteriano. La mayor parte de las faringitis son de origen vírico, para lo cual la medicina actual no tiene medicamentos eficaces. Sólo deberían de utilizarse los antibióticos cuando las placas que se observen en las amígdalas sean placas de pus causadas por una bacteria. El tener placas en las amígdalas no implica que haya pus, solo con la presencia real de pus es cuando está justificada la toma de un antibiótico.
En las anginas bacterianas de repetición, sería recomendable siempre la realización de un antibiograma, para saber que antibiótico será el adecuado para la infección y no crear así resistencias.
En el caso de que sea necesaria la toma de un antibiótico, siempre hay que suplementarlo con probióticos. No son recomendables los yogures, por el exceso de lácteos que supondría y porque muchos de los microorganismos están ya muertos, además de que pueden interferir en el mecanismo de acción de muchos antibióticos (azitromicinas, claritromicinas…)
El antibiótico no sólo mata la bacteria patógena, sino que también destruye las bacterias beneficiosas que se encuentran en nuestra flora intestinal. Esta flora puede tardar en recuperarse hasta dos años, tras la toma de un antibiótico.
La toma de los probióticos se separará dos horas de la toma del antibiótico ya que sino el antibiótico puede destruir también los probióticos.
La voz es la herramienta fundamental de comunicación entre las personas. Cada persona enferma por una serie de circunstancias personales tanto emocionales como físicas y genéticas. A lo largo de nuestra vida, el ser humano está en contacto con otras personas y también con la naturaleza y otros seres vivos y con residuos químicos, radiaciones, contaminación… que pueden resultar patógenos y susceptibles de provocar enfermedades. Es muy importante analizar el origen de mi enfermedad.
AUMENTAR
• Es bueno hacer gárgaras con agua de mar, por el aporte de minerales para la inmunidad, ya que el agua de mar es muy rica en oligoelementos.
• Una dieta rica en vitamina A y Beta carotenos (Huevos, zanahoria cruda, brócoli, calabaza, pimiento) ayudará a mejorar el estado de las mucosas de la garganta.
• No olvidarnos de la vitamina C para protegernos de las infecciones (cítricos, frutas…)
• Vitamina D y E para el sistema inmunológico (pescados azules, pipas de girasol, frutos secos, aguacate, cereales integrales…). Aceite mollers y vitamina D 3 vegana optim
• Dieta antiinflamatoria y alcalinizante
• Ayudar al sistema inmunitario, tomando algún medicamento.
• Para la mente: meditación, oración, yoga, control de la respiración y de las emociones. Suplementar si es necesario con complementos y dieta para el sistema nervioso.
• El descanso de la voz es muy importante, así como aprender a hablar correctamente con un especialista de la voz.
• Fortalecer la musculatura de la faringe y rehabilitación de la voz. Cuidados de la mucosa orofaríngea para mantenerla húmeda, con humectantes, cicatrizantes y lubricantes naturales como la miel y el propóleo. Especialmente con las personas en cuyo trabajo utilicen mucho la voz.
DISMINUIR
• Estrés, ansiedad…
• Evitar alimentos que irriten la mucosa: vinagre y alimentos muy ácidos y alimentos que mecánicamente irriten la mucosa al tragar: tostadas.
• El humo del tabaco es irritante para la faringe.
• Atención a los aires acondicionados y a los hielos de las bebidas.
Buscar el origen y la causa de la enfermedad. Normalmente cada persona tiene una tendencia a enfermar de una manera concreta y suele repetirse cada vez que bajan las defensas. Hay personas que tienen tendencia a hacer faringitis, otras anginas, otros a hacer otitis, bronquitis… En todos los casos siempre hay que reforzar nuestro sistema inmunológico. Especialmente afectados son: cantantes, oradores, profesores, teleoperadores y todas las personas que trabajamos de cara al público…
Muchas veces la faringitis crónica puede ser también una faringitis digestiva, causada por un reflujo gastroesofágico que irrita toda la mucosa de la faringe.
La faringitis vírica está causada por un virus, mientras que la faringitis estreptocócica se trata de una infección bacteriana.
La faringoamigdalitis es la inflamación de la faringe y las amígdalas al mismo tiempo que cursa con dolor de garganta. Mientras que la faringolaringitis cursa con dolor de garganta también, pero es la inflamación de la faringe y la laringe.